Las costas de las Rías Baixas son costas con alma, con tradiciones, son lugares llenos de leyendas y de historia, lugares familiares. El océano Atlántico dibujó sus paisajes cuando hace muchos siglos se adentró en la tierra. El carácter, la fuerza, el misticismo de esta tierra, dejan profunda huella en el corazón de los turistas que cada año la eligen para pasar sus vacaciones de descanso.
Cuando uno realiza un viaje a esta entrañable tierra, los lugares idóneos para alojarse son los pazos, las casas pequeñas, alojamientos rurales, lugares casi familiares. Son alojamientos más personales, más entrañables que los grandes hoteles, además nos facilitarán información sobre donde vale la pena comer algo ó qué zona es mejor para perderse por sus rías.
En las Rías Baixas disfrutaremos de la tranquilidad de sus pueblos, la belleza de su océano y por supuesto de su gastronomía. En la ría de Arousa, encontramos el corazón pesquero y su subasta de pescado en la lonja. En la ría de Muros y de Noia, disfrutaremos de sus terrazas y de los paseos por sus callejuelas, en la ría de Pontevedra hallaremos maravillosas playas y en la ría de Vigo, podemos visitar el castillo de Soutomaior que es una fortaleza medieval desde la que se domina la ría. Lo que es seguro es que realizar este viaje no le dejará indiferente.