Son muchos los rincones que podremos visitar en Tokio. De eso, no tenemos duda, por eso, vamos a mencionar algunos de los que se han convertido en imprescindibles. Un lugar como este bien se merece una escapada, aunque sea una vez en la vida para poder empaparnos de su belleza. ¿Hacemos las maletas?.
El Templo Sensoji de Tokio
Se trata de uno de los templos budistas más antiguo de la ciudad. Lo encontrarás en el llamado barrio de Asakusa. En su interior disfrutarás de varios salones así como santuarios y campanas, sin olvidarnos de los jardines que recorren el lugar. Además, junto a este templo, te encontrarás con una de las calles más famosas y comerciales que es la calle Nakamise.

Disfruta de las alturas en los miradores
A pesar de que el vértigo está presente en muchos de nosotros, hay que reconocer que un lugar como este solo se puede disfrutar desde sus miradores. Una manera perfecta de poder obtener unas imágenes panorámicas sin igual. Tienes tanto la Torre Mori como la Torre de Tokio sin olvidarnos del Edificio del Gobierno Metropolitano.

El barrio Shibuya
Es uno de los más visitados, cuenta con tiendas y restaurantes. Una zona con mucha vida, tanto de día como de noche. Aquí te encontrarás con el famoso cruce de Shibuya. Un paso de peatones desde donde puedes acercarte a ver la estatua del perro Hachiko o bien, de disfrutar de una parada en alguno de los bares del lugar, así como de sus hoteles.

Barrio Akihabara
Para todos los amantes del manga, pero también para los curiosos en general, está este lugar. Numerosas tiendas relacionadas con los vídeo-juegos y los ordenadores se encuentran en este lugar. Pero también podrás darte un paseo por su calle peatonal y disfrutar de las llamativas luces.

La isla artificial Odaiba
Se encuentra en la bahía de Tokio y conecta con la ciudad gracias al puente, Rainbow. Allí puedes disfrutar de un merecido descanso, mientras divisas la réplica de la Estatua de la Libertad o una noria de más de 115 metros. ¿Los has visto todos?.