En el artículo anterior sobre vacaciones en Hawaii, hablábamos sobre las principales islas del archipiélago. Continuaremos con la isla de Maui, es la segunda isla más grande y más habitada del Archipiélago de Hawaii. Hace pocos años era un lugar inexplorado, paradisíaco y solitario con playas desiertas y limpias. Hoy es un lugar con grandes aglomeraciones, de mucho tráfico y edificios no muy bonitos que afean el lugar.
No obstante es la isla en la que podremos avistar mamíferos marinos como la ballena, y encontraremos muchas facilidades para la práctica de deportes como el windsurf, submarinismo, o la bicicleta de montaña. La zona más concurrida de turistas está en la costa oeste, por lo que quienes deseen sacar el máximo partido a sus vacaciones, deberán dirigirse al norte y al este y visitar Kula, Haiku o La Hana Highway, que bordea el Haleakala de 3000 metros de altitud y atraviesa pintorescos pueblecitos, bosques y cataratas.
La isla de Kauai es un auténtico vergel y es la más septentrional de hawai. Tiene grandes playas excepto la costa Na Pali, con grandes acantilados. La isla tiene grandes selvas tropicales con riachuelos y cascadas lo que lo convierten en un lugar perfecto para el senderismo perdiéndose entre tanta maravilla natural, como es el caso del cañón Waimea. En el norte de la isla encontraremos Lumahai y la playa secreta, un lugar perdido de difícil acceso donde podrás conocer la absoluta soledad en tus vacaciones.
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