Si buscamos pasar unas vacaciones lo más cerca posible del paraíso, es muy probable que nos apetezca dirigir nuestros pasos hacia la Polinesia Francesa. Allí se encuentra uno de los lugares más bellos del mundo, Tikeahu, el atolón más espectacular de las islas Tuamotu, situadas en el Océano Pacífico. Es un lugar desconocido para la mayoría de turistas de todo el mundo, pero el número de visitantes aumenta notablemente cada año.
Tikeahu tiene un diámetro de 26 kilómetros y es además el lugar con vida marina más importante del lugar. En toda esta zona encontrarás paradisíacas playas de indescriptible belleza, en las que podrás practicar todo tipo de actividades acuáticas. Cualquier lugar de la Polinesia Francesa es precioso, pero este atolón se lleva la palma. En toda esta zona hay solo un hotel, aunque también hay varias pensiones. La isla cuenta incluso con su propio aeropuerto.
Su fauna es muy variada, disfrutarás de la presencia de tiburones grises, barracudas, rayas y atunes, además de bandadas de pájaros autóctonos. En cuanto a su flora, los cocoteros son la principal fuente de ingresos de los habitantes del lugar junto con el turismo y la pesca. El colorido de este lugar es un placer para los sentidos, sus aguas turquesa, verde y azul se mezclan con el color de la arena y de las especies que viven en el atolón. Sin duda, unas vacaciones en este lugar, resultarán de lo más estimulante para nuestros sentidos.